La Fundación de Colegios Diocesanos quiere acercarse a la familia y ofrecerle un verdadero espacio de formación humana y cristiana para los hijos. Muchas pueden ser las dificultades que se presentan al educador y a la escuela católica para conseguir sus objetivos. Sin embargo, una decidida identidad cristiana y una verdadera calidad de enseñanza son la mejor garantía de que conseguiremos nuestros objetivos, que no son otros que la formación integral de la persona. Tomemos pues conciencia de la importancia de la educación cristiana y de la necesidad de un talante nuevo, que responda a los retos que hoy se presentan en el marco de una sociedad plural.
Tomamos como guía de este curso las palabras del Papa Francisco el día 15 de septiembre del 2018 en uno de los encuentros con la juventud:
“Jóvenes sean albas de esperanza, no a la resignación”
